Maratón de Sevilla 2009
Los ultraOxígeno no descansan, y prueba de ello es que Sergio y Pedro estuvimos este domingo corriendo el Maratón de Sevilla. También corrió Pablo y nos acompañó una reportera de lujo, Ana.
El domingo, tras dejar nuestras pertenencias y quedarnos solo con las ilusiones y los miedos que se tienen tras meses de entrenamientos, de cuidados, de series, de rodajes, etc, nos fuimos Sergio y yo hacia la salida. Nervios, risas, suerte compañero, y pistoletazo de salida. Tras abandonar el estadio cada uno puso su ritmo, 5 min/km en el caso de Sergio, 4:30 en mi caso.
Mis primeros kilómetros fueron un poco raros porque me sentía pesado y no terminaba de encontrarme en carrera. A partir del km 4 me uní a un grupo bastante majo que iban como un reloj, a 4:30, y pensé “aquí me quedo, esta estela no debo perderla”. Así fueron pasando los kilómetros y poco a poco, en el km 15, ya me iba sintiendo mejor. El ambiente en el grupo era de compañerismo, cogiendo los más cercanos al avituallamiento las botellas para los demás, hablando muy poco pero sabiendo todos que así, en grupo y a ritmo constante, es como se corre bien un maratón.
Llegamos a la media en 1:35, clavados. En ese momento subimos un poco el ritmo hasta llegar a 4:15. Miraba el reloj sentía verdadero vértigo porque me sentía bien, mis pulsaciones se mantenían entre 157 y 163, pero al ir más rápido de lo previsto tenía dudas de si me encontraría con el muro o no. En el km 25 sólo quedabamos dos personas del grupo, un corredor veterano de Torremolinos y yo. Así fuimos hasta el 35, a 4:15 y adelantando a grupos y corredores aislados. De hecho, desde antes del km 20 no nos adelantó nadie. ¡Qué subidón mental!
En el km 35, sintiéndome genial (y para muestra la foto), decidí echar el resto y apretar. Me puse a 4:10 y así aguanté hasta prácticamente la meta. Los últimos 2 kilómetros se me hicieron largos pero apenas bajé ritmo. ¡Iba eufórico, había ido de menos a más y estaba casi a mi ritmo máximo de media maratón! Vinieron a mi mente muchas escenas de estos últimos meses, de estos entrenos duros de invierno, de los amigos y amigas que están ahí apoyando, etc.
La entrada al estadio fue espectacular. El mismo sitio por el que, 10 años antes, Abel Antón se convirtió en campeón del mundo de Maratón. El mismo túnel y el mismo tartán en el que este día yo estaba sintiéndome vencedor. Crucé la meta en 3:06:56, saboreando el triunfo que es superarse día a día, saboreando la victoria que se logra tras mucho perseguirla.
Más tarde me enteré de que Sergio y Pablo también sintieron lo mismo al cruzar la meta, consiguiendo ambos una nuesva mejor marca. Sergio concretamente bajó de una barrera mítica, los 3:30. También lo ha trabajado desde hace tiempo, y es que así es como se van consiguiendo las victorias en la vida: con esfuerzo, con sacrificio, con ilusión. Ése es el espíritu del ultrafondo, ése es el espíritu de los ultraOxígeno.
Abrazos para todos
PD: Ana, muchísimas gracias por el amplísimo reportaje de fotos que nos hiciste, tanto en Sevilla como en todas las carreras a las que vamos. Al final terminamos hablando de los que corremos y siempre nos olvidamos de los que esperáis y animáis, cuando realmente sois una parte fundamental. Gracias también por tus ánimos en el km6, en el 10, en el 37 y por tu compañía. ¡Eres un sol!
Loores y reverencias Pedro! Impresionante ese 3h06 en tu 2º maratón, tras el 3h32 del debut Mapoma08.
Aunque…al haber compartido contigo entrenos y carreras recientes ya me olía la dinamita q llevabas a Sevilla en las piernas.
en cualquier caso, la marca, la forma de lograrla y las sensaciones han sido todas redondas en tu caso, asi que saborealo. Si el maraton perfecto existe, el tuyo en Sevilla se le acerca mucho, y eso es algo casi tan raro y valioso como el unicornio blanco 🙂
Ah! Y q razon tienes con la reportera UO2, asi da gusto! En particular, me encanta tu foto de arriba al paso del 36k. Se ve perfectamente la chispa y la fuerza q aun llevas dentro, mientras los mortales nos arrastramos en la zona.
Ahora, a descansar y a saborear los recuerdos, que bien nos lo hemos ganado!
Me alegro mucho de ese tiempazo Pedro, pero sobre todo, y como le escribí también ayer a Sergio, de tus buenas sensaciones.
Y también me alegro mucho de tenerte de vuelta al mundo virtual.
Un abrazo. 😉
Y otra vez veo la foto del 35 y la de meta y me recorre un escalofrio…. ¡¡¡Hay que besarte las zapas!! menudo carrerón, como dice Sergio, casi perfecto… Ahora os mereceis disfrutar de esa nube postmaratoniana que se siente en los dias posteriores… Dias de sensaciones, recuerdos y emociones que sólo da el maratón. me alegro que todo os saliera bien a los dos. Un abrazo y espero veros pronto.
¡Dios, dios, qué impresionante! Sobre lo pesado que te sentiste hasta el km 15, me hace gracia porque es exactamente lo que habíamos estado comentando tú y yo el día anterior mientras espérabamos a recoger los dorsales 😉 Lo que me sobrecoge de tu relato es ese ritmo, no sólo estratosférico para mí, sino encima en progresión, 4:30-4:15-4:10. En cuanto al túnel de entrada en el estadio, es verdad que es espectacular por todo lo que se siente y que te produce un subidón; pero yo lo habría cambiado por tres últimos kilómetros en la calle con miles de personas haciéndonos el pasillo y jaleándonos, se me habría hecho el final mucho menos agónico 😉
En todo caso, ¡enhorabuena por el maratón, Pedro, y por todas esas buenas sensaciones! : te lo has ganado a pulso! Y disfruta unas semanas todo lo que puedas de esos recuerdos 🙂
Mis felicitaciones para ambos. Te salió la segunda parte mejor que la primera, bestial. Tras de ti, uno con gafas negras en meta, es un amigo mío corredor. Un abrazo y a seguir así.
Enhorabuena!!!! buan galopada sí señor…
Acojonante chavales, acojonante….no es que me de envidia, es que me rechinan los dientes.
Un abrazo a los dos, estais pletoricos, (eso sí, una mierdecilla comparados con Dallas, esta chica me tiene impresionado, Sergio, deja de aliñar las ensaladas con fairy, que no sabemos donde puede acabar esta mutación).
jaja, Aúpa Migue! , esperamos q vuelvas del pupitre a la luz del sol algun día….si Tutankhamon lo logró, tu tambien puedes. 😉